El aseo de las plumas 

La paloma dedica muchas horas en poner su cuerpo a punto para que nada ofrezca resistencia al aire cuando este volando y para mantener sus plumas impermeables al agua , en las horas tranquilas y en cualquier sitio , la paloma eriza sus plumas e inicia un rito necesario para ellas como el respirar , el acicalamiento en ello les va la vida , su seguridad su defensa , su velocidad , en su acicalamiento diario , la paloma empieza por una parte y termina por la otra , ordena sus plumas entresaca las viejas que hay que renovar , se saca el plumón que muda durante todo el año , procura desprenderse de los inquilinos no bienvenidos de su cuerpo se limpia las plumas de elementos extraños como excrementos y saca las barbas de sus plumas entrelazándolas con el pico con una gran destreza , pero al mismo tiempo que la paloma hace todo esto , impermeabiliza sus plumas con la grasa que coge con su pico de la glándula  uropigal situada en su rabadilla ( base de la cola ) , allí donde el pico no llega ( cabeza y cuello ) la paloma lo engrasa restregando su cuello y cabeza por el resto del cuerpo la grasa y la buena colocación de sus plumas , forman un aislante perfecto que consigue mantener el calor en invierno y por el contrario , ejerce de aislante contra el calor en verano 
Cuando una paloma no se acicala , es síntoma de que algo no le funciona fisiológica mente , por lo tanto habrá que observarla atentamente , es muy importante que antes de un concurso donde se prevean posibles lluvias , no bañar a las palomas , pues pueden perder impermeabilidad y por tanto capacidad de vuelo si nos fijamos en una paloma cuando se acicala , se nota que disfruta con lo que esta haciendo